JUEGO DE LAS CHAPAS
Fernando, Lucía, Sergio y Candela, del C.P.R. Luis Vives de Ourense nos explican uno de los juegos tradicionales más populares de la generación de nuestros padres.... Esperamos que disfrutéis mucho jugando
Píntase no chan un carreiriño en forma de serpe, con rectas e curvas e uns oito ou nove centímetros de ancho. Nel debúxanse zonas de peóns, areas movedizas, pontes, cárceres e atallos.
Cada xogador colle unha chapa (tapóns de refresco ou cervexa), márcaa cun sinal para personalizala e énchea de barro para que pese. Co cu para abaixo tira co dedo índice ou maior apoiado contra o gordo arrempuxando a chapa para adiante sen saírse da serpe. Pódese tirar tres veces seguidas se a chapa vai por dentro do percorrido; se se sae haberá que esperar nova quenda. As zonas de castigo (pozo, areas...) implican tres quendas sen xogar a non ser que os compañeiros tamén caian aí. A morte e o cárcere supoñen a volta a casa, ó inicio. Nos atallos pódese tratar de pasar pero se a chapa sae fóra tamén hai volta a casa
Cada jugador coge una chapa (tapón de refresco o cerveza), la marca con una señal para personalizarla y la llena de barro para que pese. Con el reverso hacia abajo tira con el dedo índice o mayor apoyando contra el pulgar empujando la chapa para adelante sin salirse de la serpiente. Se puede tirar tres veces seguidas si la chapa va por dentro del recorrido; si se sale tendremos que esperar un nuevo turno. Las zonas de castigo (pozo, arenas...) implican tres turnos sin jugar a no ser que los compañeros también caingan ahí. La muerte o la cárcel supone la vuelta a casa, al inicio. En los atajos se puede tratar de pasar pero si la chapa sale fuera también hay que volver a casa.